Antes de explicar la guía sobre la rehabilitación de edificios, es importante entender que el nivel de deterioro de la calidad urbana y de la calidad de vida en la mayoría de las ciudades en todo el mundo reclama una profunda regeneración de los sistemas urbanos a todas las escalas.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Agenda Urbana Hábitat III, de las Naciones Unidas y la Agenda Urbana Europea en el ámbito internacional, junto con la Agenda 2030 y la Agenda Urbana Española, en el panorama nacional, han incluido la rehabilitación y regeneración urbana como un mecanismo eficaz para alcanzar ciudades de mayor calidad, más resilientes, capaces de favorecer la integración social y convertirse en una solución local para los problemas globales en torno al cambio climático al que se enfrenta el planeta.
Por otra parte, la Directiva (UE) 2018/844, establece que cada Estado miembro elaborará una estrategia a largo plazo para apoyar la renovación de sus parques nacionales de edificios residenciales y no residenciales, tanto públicos como privados, transformándolos en parques inmobiliarios con alta eficiencia energética y descarbonizados antes de 2050, facilitando la transformación económicamente rentable de los edificios existentes en edificios de consumo de energía casi nulo.
En cumplimiento de este mandato, España publicó en junio de 2020 la Actualización 2020 de la Estrategia a largo plazo para la Rehabilitación Energética en el Sector de la Edificación en España (ERESEE).
¿Cómo debemos rehabilitar?
Rehabilitar con una visión global.
Una rehabilitación integral es una reforma para actualizar nuestro edificio a las necesidades y requerimientos actuales, abordándolo de forma global. Para hacerlo, se ha de partir de una visión previa completa del edificio, teniendo en cuenta las principales carencias a resolver: conservación, accesibilidad y eficiencia energética. Después, la rehabilitación puede acometerse de una sola vez o por etapas, pero es importante que exista este análisis global para poder planificar y coordinar las distintas actuaciones. Este análisis lo tiene que realizar un/a profesional cualificado/a, como lo es un/a arquitecto/a. Las comunidades de propietarios están muy acostumbradas a las obras de rehabilitación o reforma, a derramas, obras urgentes y/o obligatorias ITE/IEE desfavorables (la ITE es la fuente informativa acerca de la situación de los edificios más antiguos en los municipios, de la que estos debieran partir).
La idea que subyace en la inclusión dentro del IEE son los ajustes razonables en accesibilidad y de la certificación energética: la búsqueda de sinergias entre la conservación y otro tipo de obras de carácter voluntario, como la rehabilitación energética), pero generalmente se actúa sólo en una parte de la edificación. Programar las obras con una visión global y de la mano de un/a profesional cualificado/a tiene muchos beneficios, entre ellos, un mejor resultado y el ahorro económico. A continuación, se detallan las principales carencias a resolver en un edificio, que siempre se han de acompañar de un análisis previo de características generales (época y tipología de construcción, materiales en fachadas y cubiertas, características estructurales, etc.): CONSERVACIÓN, ACCESIBILIDAD Y EFICIENCIA ENERGÉTICA.
Conservación
Son obras destinadas a eliminar problemas que hacen que un elemento del edificio no cumpla su función o ponga en peligro la seguridad de las personas. Se incluyen obras que garanticen la seguridad y habitabilidad. Ejemplos de obras de conservación: Solución de humedades en el sótano, eliminación de bajantes, revestimientos y otros elementos con amianto, problemas en la estructura, filtraciones en la cubierta, desprendimientos de balcones o fachada, adaptar las instalaciones (electricidad, calefacción…) a una nueva normativa.
Son, generalmente, obligatorias para la propiedad. Es lo que se llama el Deber de Conservación: Obras obligatorias para “conservar los edificios en las condiciones legales de seguridad, salubridad, accesibilidad universal, ornato y las demás que exijan las leyes para servir de soporte a dichos usos”, afectan a la totalidad de los propietarios que sufragarán su coste de forma proporcional a su porcentaje de participación en la comunidad (también llamado cuota de participación o enteros).
Orden de ejecución: Imposición de la Administración que obliga a ejecutar las obras de conservación para mantener el edificio en las adecuadas condiciones de seguridad, salubridad, accesibilidad universal y ornato, si los particulares no las realizan.
Declaración de ruina: Degradación del edificio que impide la continuidad de su vida útil, ya sea por motivos técnicos (que hacen inviable su reparación), por motivos económicos (dado el elevado coste de reparación) o por razones urbanísticas (principalmente por estar fuera de ordenación).
Accesibilidad
Son obras que mejoran la accesibilidad en cualquier aspecto relacionado con la accesibilidad universal del edificio. Ejemplos de obras de accesibilidad: Instalación de ascensor, bajada a cota cero, instalación puerta automática, indicaciones para personas con discapacidad visual o auditiva…
La accesibilidad universal es la condición que deben cumplir un edificio y sus instalaciones para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas en condiciones de seguridad y comodidad y de la forma más autónoma y natural posible.
Rehabilitación energética
La rehabilitación energética incluye obras que mejoran la eficiencia energética del edificio, es decir, que hacen que consuma menos energía y que la que consumimos sea menos contaminante. Como criterio general, es recomendable, en primer lugar, actuar siempre sobre la demanda de energía, mejorando el “abrigo” del edificio, esto es, la envolvente térmica, su forma y materiales (medidas pasivas). Para después, mejorar la eficiencia de las instalaciones de calefacción y refrigeración e incorporar fuentes de energía renovables teniendo en cuenta esta nueva y menor necesidad de energía (medidas activas).
MEDIDAS PASIVAS
Aislamiento de fachada y cubierta Cambio de ventanas Protección solar.
Envolvente térmica: Siguiendo el símil del abrigo del edificio, es una capa que rodea al edificio, lo protege de los cambios de temperatura del exterior y evita que se escape el frío y el calor del interior. Lo forman el tejado, las fachadas y medianeras, las ventanas y el suelo de planta baja o de sótano.
Demanda energética: Nuestro edificio, dependiendo de su forma, materiales y habitantes, necesita una cantidad de energía para calentar agua y para conseguir una temperatura confortable. Es un dato que aparece en el CEE.
MEDIDAS ACTIVAS
Se basan en la mejora de las instalaciones de agua caliente, calefacción y refrigeración del edificio. Son obras de instalación de sistemas más eficientes e incorporación de fuentes renovables, preferiblemente producidas dentro del edificio o en su entorno próximo.
Ejemplos de medidas activas: Instalación de placas solares, mejorar la eficiencia energética de la caldera, instalar caldera de pellets, aerotermia.
Fuentes de Energía Renovables: Se denomina “energías renovables” a aquellas fuentes energéticas que no utilizan combustibles fósiles, sino recursos capaces de renovarse ilimitadamente. Se basan en la utilización del sol, el viento, el agua o la biomasa vegetal o animal -entre otras-.
Beneficios de la rehabilitación
- Transformar nuestros edificios para hacerlos más habitables y accesibles.
- Mejorar la salud de las personas.
- Aumentar la confortabilidad en los hogares.
- Ahorrar en la factura energética.
- Mejorar la eficiencia energética.
- Aumentar el valor de las infraestructuras.
- Respetar y cuidar el medioambiente, atendiendo a los ODS.